Nueva York. Estados Unidos. La luna de miel entre el laureado productor musical Sergio George y el bachatero de origen dominicano Prince Royce llegó a su fin, hecho que se mantuvo en secreto hasta hoy cuando una fuente de entero crédito reveló que la separación es real.
Según la fuente Royce no se sentía a gusto con el manejo de su carrera por lo que puso el caso en manos de abogados para buscar una separación sin traumas.
Personas cercanas a ambos catalogan de ingratitud esta aseveración cuando está a la vista de todos la meteórica proyección alcanzada por el bachatero de la mano de Sergio George,
“Aunque se llegó a un acuerdo, hubo intercambio de palabras, algunas fuera de tono, sin embargo, aunque Sergio no lo maneja continúa como socio y productor ya que existe un contrato que el artista debe cumplir”, reveló la fuente. Otra persona consultada y que estuvo en los inicios de esta unión reveló que el causante de la separación es quien de inmediato asumió el manejo de la carrera del joven bachatero que el próximo 8 de septiembre se presentará junto al dúo puertorriqueño Wisin y Yandell en el Estadio Olímpico Félix Sánchez, de Santo Domingo.
Pero George no se quedará de brazos cruzados y contraataca apostando a la bachata urbana con la integración al catálogo de su sello Top Stop Music del ex integrante del grupo Aventura Toby Love, con el que apuesta a colocar un nuevo ídolo juvenil en el mercado de la música y, se dice, tiene la idea de convertirlo en la fuerte competencia de Royce.
El sueño americano
De vendedor de teléfonos celulares a ser una de las promesas de la bachata urbana fue la realización del Sueño Americano para Geoffrey Royce Rojas, nacido en el Bronx, en el hogar conformado por un taxista y una estilista, ambos dominicanos.
Ese sueño llegó de la mano y el talento de uno de los más trascendentes productores musicales: Sergio George, responsable del éxito de grandes figuras de la música latina.
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